Una persecución en alta mar de una narcolancha en Cartagena finalizó cinco horas más tarde en aguas de Alicante con la detención de sus cinco tripulantes y la incautación de 2.000 kilogramos de hachís. Agentes de la Policía Nacional y funcionarios de la Agencia Tributaria, en una operación conjunta, han apresado a estas personas, que intentaron deshacerse de la sustancia estupefaciente al arrojar los fardos por la borda. En total se intervinieron un total de 66 fardos que suman 2.000 kilos de hachís, además de diversos teléfonos satélites y dispositivos informáticos. 

Según han informado hoy desde la Comisaría Provincial de Alicante, la intervención tuvo lugar la pasada semana, cuando el helicóptero de la Policía Nacional detectó una narcolancha que navegaba por el mar Mediterráneo a unas 80 millas de la costa de Cartagena. La embarcación, de unos 14 metros de eslora y dos motores de 300 CV, iba tripulada por cinco individuos y se aproximaba a las playas de la Comunidad Valenciana con el propósito de descargar los fardos de hachís que portaba. 

En ese momento se inició una persecución junto a una patrullera del Servicio de Vigilancia Aduanera, que se desarrolló durante más de cinco horas y 100 millas náuticas, y que obligó a los tripulantes a deshacerse del hachís, arrojando los fardos por la borda. Finalmente, la acción conjunta y coordinada en alta mar permitió rescatar el hachís arrojado, además de abordar la lancha rápida y detener a sus cinco ocupantes ya en aguas de la provincia de Alicante.

Como resultado de la operación se intervino 66 fardos de hachís con un peso de 2000 kilos, una embarcación de alta velocidad, teléfonos satélites y diversos informáticos.