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Campaña citrícola en la provincia: precios más altos pero en guardia por el covid

Los productores tachan de positivo el inicio de temporada pero se enfrentan a meses complicados por las consecuencias que pueda tener la pandemia y la ausencia de recursos hídricos uLa demanda de vitamina C en Europa salva la exportación

Recogida de limones en un campo de Almoradí, en la Vega Baja, donde muchos limoneros se han secado como consecuencia de la DANA.

La campaña citrícola en la provincia se ha iniciado con una sustancial subida de precios con respecto al comienzo de la anterior, pero cómo evolucione en los próximos meses dependerá de dos factores fundamentales: la falta de agua y la pandemia de coronavirus. Los productores tachan de «positivo» el inicio de la que, seguramente, sea la campaña más difícil a la que se hayan enfrentado, con una subida de hasta un 40% de los precios en origen en algunas variedades como la mandarina. Sin embargo, no dudan en afirmar que se enfrentan a unos meses inéditos y con mucha incertidumbre por el covid y la falta de agua, debido a la poca certeza de disponer de este recurso por las decisiones del Ministerio para la Transición Ecológica, como el aumento de caudales ecológicos del Tajo «y los recortes continuos en las transferencias mensuales en contra de lo que aconseja la propia Comisión de Explotación del Ministerio», según señalan desde Asaja Alicante.

Los primeros 40 días de campaña están siendo como una montaña rusa. A principios de septiembre los precios en origen para muchas variedades de cítricos subieron un 40%. Pero, en el segundo mes de campaña, las operaciones de compraventa comenzaron a ralentizarse, lo que coincidió con algunas partidas de cítricos justas de calibre debido a las escasas precipitaciones del verano y lo que va de otoño, efecto que podría subsanarse si se reciben aportes a través del Tajo-Segura. Y, en las últimas semanas, la tendencia es, de nuevo, de subida de precios por el aumento de la demanda foránea con la llegada de los primeros confinamientos en países del entorno. En la última semana ha comenzado a reactivarse el mercado por el incremento en Europa de búsqueda de fruta con vitamina C, por su refuerzo del sistema inmunitario, y que ya fue muy demandada al final de la anterior campaña.

«Nos encontramos a la expectativa porque, a pesar del buen arranque de la campaña y de la posterior ralentización, están aumentando los pedidos de cítricos cada día, principalmente de los países que ya están aplicando confinamientos domiciliarios », explica el presidente de Asaja Orihuela y productor de cítricos, José Vicente Andreu. Andreu confía en que la línea de la exportación continúe la senda ascendente de la campaña anterior. Desde Asaja señalan que la exportación de naranjas se incrementó, de la campaña 2016-2017 a la de 2019-2020, casi un 3%, pasando de exportar 1.108.486 toneladas a 1.140.741, con un precio medio de salida de almacén que superó el 5%. En cuanto al limón, se pasó de exportar 179.475 toneladas en 2016-2017, a 211.557 toneladas en la última campaña, un aumento del 18%, con un incremento de su valor de más del 6%.

Con respecto a los precios en la actual campaña, destacan las mandarinas Oronules, que salieron entre 0,60-0,70 euros el kilo, un 40% más y las Clemenules, que empezarán esta semana, con un precio de entre 35 y 40 céntimos el kilo, un 33% más. En cuanto a las naranjas, las Navelinas han tenido un precio en el campo de alrededor de 28 céntimos, un incremento de un 16%. En el caso del limón las cotizaciones son ligeramente más bajas que las del ejercicio anterior, lo que en un principio se vio justificado por el aumento de cosecha en un 11%, como publicó la Conselleria de Agricultura, y que se verá contrarrestado por el secado y muerte por asfixia de miles de limoneros de la Vega Baja por la DANA, con unas pérdidas de 25.000 toneladas. La variedad de limón Fino cotiza un 15% menos.

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