Hace un año y medio eras casi desconocido y hoy agotas entradas a una velocidad que ya quisieran otros.
La verdad es que ha sido un proceso bastante rápido. Es muy gratificante poder ir a Alicante y que se agoten las entradas. En estas circuntancias de covid doy las gracias a la gente, que no tenga miedo a ir a conciertos, es una maravilla que vaya la gente.
¿Empezaste en Instagram?
Sí, bueno, empecé a colgar mis canciones y covers en Instagram pero fue cuando empecé a subir mis temas a Spotify que empezó todo a crecer. No creo que Instagran haya sido el factor más importante pero siempre va de la mano. Adía de hoy las redes en general son la plataforma que ayuda a darse a conocer, porque por venta de discos no se da la misma historia.
Has sacado una docena de canciones pero no tienes un disco, ¿estás trabajando en ello?
Empecé con la grabación del disco a principios de año y con el confinamiento se paró todo. Ahora he estado volviendo al estudio y a encontrar momentos para seguir con la grabación.
Ese disco parece que lo hagas porque toca hacerlo, ¿no te entusiasma mucho?
Yo soy partidario de los discos pero al mismo tiempo no creo en su durabilidad y creo que a nivel comercial la gente no saca discos porque no es rentable y a nivel de marketing no tiene mucho sentido. A día de hoy la música se consume muchísimo más rápido y de manera diferente que hace solo cinco años. El formato disco es algo que siempre he querido hacer y lo voy a hacer, pero por algo más sentimental que otra cosa
¿Empezaste muy joven con la guitarra?
Empecé con quince años, me vino un poco de familia porque mi bisabuelo era jotero y era quien enseñaba bandurria y guitarra en el pueblo, por mis tíos y mi abuelo me vino. Nací en Benicassim, mis padres son de Zaragoa y mi abuela de un pueblo de Teruel, Las Cuevas de Cañart, de 80 habitantes censados. El último año al haber puesto el nombre del pueblo en una canción ha habido gente de diversos puntos de España que se ha plantado allí preguntando a las abuelas por Guitarrica.
Las etiquetas son odiosas, pero si tuvieras que definir tu música, ¿nuevo flamenco, indie folk...?
Odio esta pregunta, no porque no pueda encasillar la música que hago, sino porque no sé todavía la música en la que me quiero encasillar. Hoy pienso que es una cosa y puede que en una semana piense todo lo contrario y que el rumbo de lo que quiera hacer cambie. Creo que todo viene de la música tradicional, popular, de raíces, al final es guitarra y voz, y a partir de ahí se puede transformar todo en lo que pueda ser.
¿En tu disco estarás tú solo con la guitarra?
He empezado a grabar el disco con Raül Refree. Yo antes me grababa con la guitarra y unos pocos arreglos, todo bien hilado y seguro, y pasar a grabar con otra persona fue bastante difícil. El proyecto del disco se basa en la idea de mantener la esencia de guitarra y voz, y mezclarlo con producciones un poco más modernas o tener otro sonido pero que siga manteniendo la misma esencia.
Has hecho colaboraciones muy interesantes, ¿cómo fue trabajar con Niño de Elche?
Fue a raíz de la realización del disco homenaje a Sabina. Los de Sony me dijeron que me tocaba con Niño de Elche y yo elegí la canción Cerrado por derribo, mi favorita. Fue divertido y un lujo grabar con él y verle tocar
¿Te llaman mucho?
Sí, surgen muchas cosas, pero yo siempre he sido tranquilo, de querer ir a mi bola. Nunca me cierro a nada y me gustaría en un futuro colaboraciones con artistas que me flipan. Ahora me gustaría acabar el disco, definir el concepto y sentar las bases de lo que quiero hacer y luego trabajar con diferentes artistas
¿Temes ser un fenómeno de moda?
Hay quien dice que soy un fenómeno de redes, pero yo empecé por la música y me gustaría demostrarles que están equivocados
Tu público es muy diverso
Sí, es súper bonito ver gente de todo tipo en tus conciertos sin un patrón común. Al final con la música sencilla y canciones simples se puede llegar a un publico amplio.
